Bill Morrow de River Ridge, Louisiana, ha sido un ávido carpintero autodidacta y aficionado durante muchos años. En el año 2003 abrió la empresa a la que pretendía dedicarse tras su jubilación, Papa's Workshop, la que atendía a tiempo parcial. En el 2010, la empresa de ingeniería donde Bill trabajaba cerró sus puertas inesperadamente; sin embargo, Bill afirma que, a la larga, eso terminó siendo bueno ya que le permitió poner en marcha su negocio para la jubilación antes de lo esperado.
“Roy Brewer trajo una máquina al taller para hacer una demostración y considerando que lleva esa máquina prácticamente a todas partes, me imaginé que seguramente sería bastante duradera. La demostración me convenció de que el grabador sería un recurso valioso para el taller y posiblemente me generaría nuevas oportunidades.
Bill Morrow
Ese mismo año, Bill compró un viejo taller de reparación de autos y lo transformó en un taller de carpintería completamente funcional. Actualmente, Papa’s Workshop es un próspero negocio de carpintería dedicado a toda clase de proyectos especiales, incluidos proyectos de licitación para el juego más importante del fútbol. Bill, que nunca ha disfrutado del trabajo repetitivo, siempre ha estado más interesado en proyectos de carpintería personalizados, que pueden ir desde gabinetes hasta muebles y obsequios especiales. “Prefiero los proyectos exclusivos y únicos en su clase”, afirma Bill. “Vi un anuncio de Epilog Laser en una revista de carpintería y pensé que sería buena idea averiguar más sobre el sistema. Después de recibir un paquete de información, programé una demostración en el taller con Engraving Concepts y poco después, compré el sistema Epilog Mini”.
Al igual que muchos clientes de Epilog, Bill sabía muy poco sobre la industria del grabado antes de seleccionar su sistema láser.
“No tenía ningún conocimiento sobre el grabado en láser y no estaba buscando ninguna característica en particular”, comenta. “Francamente, no investigué mucho sobre otros sistemas láser”, agrega Bill. “Roy Brewer trajo una máquina al taller para hacer una demostración y considerando que lleva esa máquina prácticamente a todas partes, me imaginé que seguramente sería bastante duradera. La demostración me convenció de que el grabador sería un recurso valioso para el taller y posiblemente me generaría nuevas oportunidades. Estando en el negocio de producir creaciones personalizadas en madera, uno de los proyectos más interesantes de Bill fue ayudar en la reciente licitación de Nueva Orleans para el Súper Tazón 2018.
“La Fundación de Deportes de Nueva Orleans le encargó a Cabinets by Perrier que fabricara cajas con forma de libro. El señor Perrier acudió a mí para que grabara los diseños de las partes delantera y trasera de las cajas”, nos explica Bill. “El proyecto tenía un plazo bastante estrecho y uno de los desafíos era intentar idear un sistema que nos permitiera reducir el tiempo de grabado. Al dividir el diseño en ‘columnas’, pude eliminar gran parte del ‘tiempo muerto’ que implicaba el movimiento del cabezal del láser. También tuve que realizar una serie de variaciones para la aprobación del cliente, lo cual empeoró aún más la escasez de tiempo”, agrega, explicando que todas las cajas estuvieron listas según las especificaciones justo a tiempo para el proceso de licitación.
“Las cajas de licitación del Súper Tazón han sido el trabajo de grabado más importante que he realizado hasta ahora”, afirma Bill, “y a pesar de que no ganamos, fue un verdadero honor participar en el proceso. Sin el sistema Epilog Laser, uno de mis más emocionantes y memorables proyectos nunca habría sido posible”.